lunes, 31 de mayo de 2010

A partir de la observación de la sociedad, constituida por masas sometidas al Rey, discurre del vínculo existente entre soberano y súbditos: los hombres voluntariamente renuncian a un estado de natural de inocencia para someterse a las reglas de la sociedad, a cambio de beneficios mayores inherentes al intercambio social. Este consentimiento voluntario se materializa a través de un contrato, “El Contrato Social”.

El hombre primigenio es ser sin maldad, en el que predominan dos sentimientos básicos: (i) amor de sí, instinto de autoprotección, y (ii) la piedad, repugnancia por el sufrimiento ajeno. A medida que crece la población se va agrupando, y esa unión crea falsas necesidades. Para cubrirlas el hombre inventa la agricultura y la ganadería, pero cuanto más tiene el hombre más desea, y ciertas personas acumulan riquezas, éstos sufriendo por sus vidas y por sus fortunas debido a los recelos creados promueven un pacto, este pacto será el primer código jurídico.